una más a mi lista de chequeados

Desde el momento en que supe que venían dije tengo que ir allí como sea, tuve un plan hasta para comprar entradas en platea. Pero una vez más, los astros se conjugaron y nada de eso paso. Lo bueno de ser chica, es que quepo en todas partes (maletas grandes, sí señor) y lo bueno de salir sola es que también hay lugar en todas partes.

Algo me decía que tenía que comprar la entrada en la boleteria del Arena Santiago. No se paga el recargo y me ahorraba los $2.500. Lamentablemente las entradas más baratas son las que se acaban más temprano y es triste enterarse de eso cuando se está afuera del lugar y a 5 minutos que parta la función.

Pero hey, siempre hay espacio para uno, así que suckers... fui a Lord of the Dance, pagué solo 10 mil pesos, y no me importó sentarme arriba pq se veía muy bien - tanto como los VIP que estaban sentados planos- y la música se escuchaba perfecto y ahí estaban con sus zapateos supersonicos, y esos pantalones de cuero que le quedaban tan bien al rol principal, en un momento pensé que le podían sacar la camisa, y las violinistas, y las melodías que ya conocía y el zapateo -ahora que lo pienso el teclado suena un poco como el baile irlandes- y las luces a todo cachete, y denuevo los pies, y las minas con sus increíbles largas y bien formadas piernas.

Si la vida fuera como Harry Potter, definitivamente me compro los binoculares que ponen las imagenes en cámara lenta.