lo que pasa cuando no se cambia la tele

Amantes de la televisión, aquí les traigo desde el fondo de nuestra memoria uno de los programas más queridos, pero que nadie se atrevía a mencionarlo de primeras en las conversaciones. Antiques Roadshow... Su música tipo concierto brandenburges, el doblaje extraño, la estética británica de campiña, it was bloody brilliant. Gracias a este programa que daban en People&Arts, me di cuenta que siempre he querido un escritorio escocés del siglo XIX.

El programa que dieron al aire era el de la BBC, que continúa hasta el día de hoy, claro que el animador que conocimos es Hugh Scully.



Da lo mismo si escribo una historia detallada del programa, así que resumo:

Varios apreciadores de antiguedades, con distintas especialidades iban por los condados de Inglaterra donde las personas llevaban los cacharros tanto tiempo guardados en las bodegas. Después de hablar de la pieza y contextualizar, le podían decir dos cosas a sus dueños. Una que lo que pensaban que valía mucho era una simple copia bien hecha, o que esa figura de porcelana que les regalaron para el matrimonio tienen que asegurarla porque vale millones. Lo mejor, las caras.

Uno de mis episodios más memorable fue el del señor que tenía unas cartas originales de J.R.R Tolkien. The man itself. Hablando de invaluable.