Entonces la cicletada estuvo de pelos... alrededor de 3mil personas. Aún así me encontré con la Gusi, todo gracias a mi ojo de lince. También hubo 3 mascotas.
Después su post-cicletada (Torobayo y Barros Luco, que gran combinación) conversación amena, las micros transantiago pasaban por la calle y se podía seguir la conversación sin ningun problema. Ah que no habían visto desde ese punto de vista.
Pero lo mejor, lo mejor fue la vuelta. Considerando que mi bicicleta es el acompañante ideal y que siempre está ahí, compañera incondicional me vine desde plaza italia, por la alameda, sin manos y cantando (parte recordando el finde) y el viento era tibio y las luces eran verdes. Es como Madonna, una nunca deja de sorprenderse... y el último video me dan ganas de bailar y tomar algo.
Lo único que lamento es que perdí mi botella por un "evento" en la calle.
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