Sí, me pondre sentimentaloide para decirles que hoy-anoche me junte con Inka mi amiga de Finlandia para despedirla de Chile. Como muchas despedidas a las que me ha tocado ir, pero no de simple visita, sino que a despedirme de amigos, gente que se dio la pega de conocer mí país de criticarlo y de quererlo. Y lo pasé bien y volví a ser la única chilena de toda una mesa. Y cuando se empieza a sentir bien de nuevo, y es un good time to roll on, lo mejor de todo, es saber que no es impresindible tener alguien al lado para sentirse así.
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