Me monté en la montaña rusa de la adrenalina pura, 100%, inyección a la sangre-cerebro. Como ese momento en que estaba tirada en la cama esperando que el ketoprofeno hiciera efecto y lo hizo, y veía mis pupilas dilatarse, todo eso pero en cámara ultra rápida con zoom y música. Loco!!!! Puta la wea alucinante. Transipré, me encrispé, grité, 3 mil teorías por minutos y ahora.... ahora me duele el cuello y la espalda. Pero no importa, porque la espera acabó. Y los lunes vuelven a ser completos, vuelven a ser lo que eran, vuelven a perderse.
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