mayo 22, 2006

Semana de la solemnidad

Qué bonito día, 21 de mayo, para dar inició a la semana de las solemnes. Y digo bonito porque siempre va a ser reconfortante ver a hombres en uniforme, huasos con pantalones apretados o personas que las vestían de marineno, como a este chiquillo de aquí, un Andrea Casiraghi de esos tiempos.

Y ya que estamos solemnes, voy a escribir unas palabras sobre una noticia que leí en El Mercurio, que rompió mi corazón -sí, tengo corazón- mi desazón es tan grande como la que podrían tener dos amantes en el siglo XVIII -lo que se resumen a unas cuantas cartas imposibles de leer por lo melosas y dramáticas que se ponían- y es un tema que a todos debería preocuparnos. Angelini puso plata y ahora es parte junto con Matte para ese proyecto asesino, que son las centrales hidroelectricas en Aysen.
Estos weones ah? que se creen, claro, como cagan plata da lo mismo lo que hagan porque total, lo compran, y listo, se acabó el problema. Que les va a importar a ellos inundar una parte de Chile, total ellos viven en sus castillos allá por arriba, y da lo mismo que acá abajo nos estemos ahogando con la caca de aire que tenemos -me refiero, que aparte de tener plata, y mucha, tienen el mejor aire respirable de Santiago, ni esa les toca- y no nos queda otra que contentarnos con un buen plato de porotos. De verdad siento que estuvieran regalando el país, o sea, si vamos a inundar el sur, regalemos altiro una parte del norte a los bolivianos, que los argentinos se queden con las montañas que quieran y llamemos a los rusos pa' que se queden con la Antartica, si total ya saben lo que es vivir con hielo.
Ahora, argumentos pro me pueden decir muchos. A dónde la vieron que después que usen a los habitantes de tan hermosa región para construir las represas van a llamar Fernando Hueilan para que se quede viendo las turbinas. Si es por ofrecer trabajo y del bueno, manden ahora a jóvenes del lugar a estudiar ingenieria para que después vuelvan a trabajar a las centrales. Talentos no deben faltar, estoy segura.
Y la energía? Va a haber déficit y todo lo que quieran, pero no hubiera sido mucho mejor que la mitad del dinero que van a poner lo inviertieran para buscar nuevas formas de abastecimiento. O me van a decir que con las que hay basta y estamos cagaos y eso es.
Lo que sé de este proyecto es bien básico, pero cuándo perder flora y fauna va a ser un buen negocio.
Y me extendí más de la cuenta, y se me olvidó lo que iba a decir, que era más del tono normal de este blog, el cual es una incógnita. Pero quiero agradecer a Warner por poner la semana del clímax, en una fecha tan querida, lo tomaré como un presente.

Otra más no hace daño

Bjorn Andresen como Tadzio en la película Muerte en Venecia

del libro homónimo

1 comentario:

Anónimo dijo...

El problema de Aysén lo hemos discutido bastante con la profe en el ramo "Evaluación de Impacto Ambiental", un tema complicado por la cantidad de personas que involucra.

Yo tampoco estoy de acuerdo a que se inunde una de las pocas praderas naturales que existe en Chile, siendo que ya el terreno cultivable es poco (de las 75,6 millones de ha que tiene Chile, el 80% son montañas, y solo 5 millones son cultivables, las cuales se han ido reemplazando por sitios urbanos)

Ojalá no pongan la presa, o en su defecto, que le hagan caso a Horvath y hagan presas más chicas con un menor impacto en el medio ambiente.