No somos los mismos
¿Han escuchado mis queridos, alguna vez, eso de que somos los ingleses de sudamérica? Siempre me he preguntado los motivos de aquella información imposible. ¿Será por lo puntuales? ¿Por lo rubios? ¿Por lo cosmopolita de nuestra capital? ¡My God!
Sin embargo, salvando un océano completo, Canal13 se atrevió con la adaptación chilena de una serie tan premiada como british: The Office, acá "La Ofis", en una maniobra sin duda arriesgada.
Debo decir, mis queridos, que aunque confío en la capacidad actoral de Luis Gnecco vi el primer capítulo con un poco de miedo. Porque pasar del "Jappening" o "El diario de Brea", al humor implosivo que Ricky Gervais popularizó en el mundo, fue sin duda un momento extraó. Y esta no es la adaptación de "Casado con Hijos". No estamos frente a una seguidilla de gags a ritmos probados. Para ver "La Ofis" hay que exponerse a la medianía, al mal gusto, a la vergüenza ajena y la humillación profunda, reconocerse en ello, reírse de uno mismo y luego soltar una risita socarrona. !My God!
El canal católico apostó por la adapatación rigurosa: en lo visual y en lo dramático. Y, queridos míos, la verdad es que en un país dominado por Che Copete, Tony Esbelt y el chiste de Otto, el riesgo se agradece y de alguna forma extraña y misteriosa termina funcionando. Más curioso aún es que la serie haya marcado 22 puntos de peak, habiendo comenzado cerca de las 12 de la noche. Eso mis queridos, me golpeó, lo admito. ¿Es que ya no somos los mismos?
Luis Gnecco se lució en un rol repulsivo, sobre el cual se sostuvo íntegramente el primer capítulo. Y el resto del elenco, en su mayoría desconocido para la pantalla chica, se acercó con éxito al registro de falso documental que el formato exige. Aunque mucho de los personajes fueron apenas esbozados, el saldo fue definitivamente positivo.
Queridos míos, cuando hemos construído nuestro imaginario humorístico televisivo sobre una sarta de chistes escatológicos, que una comedia de este calibre funcione resulta definitivamente esperanzador. !Hay vida detrás del televisor!--
¿Han escuchado mis queridos, alguna vez, eso de que somos los ingleses de sudamérica? Siempre me he preguntado los motivos de aquella información imposible. ¿Será por lo puntuales? ¿Por lo rubios? ¿Por lo cosmopolita de nuestra capital? ¡My God!
Sin embargo, salvando un océano completo, Canal13 se atrevió con la adaptación chilena de una serie tan premiada como british: The Office, acá "La Ofis", en una maniobra sin duda arriesgada.
Debo decir, mis queridos, que aunque confío en la capacidad actoral de Luis Gnecco vi el primer capítulo con un poco de miedo. Porque pasar del "Jappening" o "El diario de Brea", al humor implosivo que Ricky Gervais popularizó en el mundo, fue sin duda un momento extraó. Y esta no es la adaptación de "Casado con Hijos". No estamos frente a una seguidilla de gags a ritmos probados. Para ver "La Ofis" hay que exponerse a la medianía, al mal gusto, a la vergüenza ajena y la humillación profunda, reconocerse en ello, reírse de uno mismo y luego soltar una risita socarrona. !My God!
El canal católico apostó por la adapatación rigurosa: en lo visual y en lo dramático. Y, queridos míos, la verdad es que en un país dominado por Che Copete, Tony Esbelt y el chiste de Otto, el riesgo se agradece y de alguna forma extraña y misteriosa termina funcionando. Más curioso aún es que la serie haya marcado 22 puntos de peak, habiendo comenzado cerca de las 12 de la noche. Eso mis queridos, me golpeó, lo admito. ¿Es que ya no somos los mismos?
Luis Gnecco se lució en un rol repulsivo, sobre el cual se sostuvo íntegramente el primer capítulo. Y el resto del elenco, en su mayoría desconocido para la pantalla chica, se acercó con éxito al registro de falso documental que el formato exige. Aunque mucho de los personajes fueron apenas esbozados, el saldo fue definitivamente positivo.
Queridos míos, cuando hemos construído nuestro imaginario humorístico televisivo sobre una sarta de chistes escatológicos, que una comedia de este calibre funcione resulta definitivamente esperanzador. !Hay vida detrás del televisor!--
Eh sí po, a mi me pasó algo parecido. Ricky Gervais is the man. Igual no me gusta como suena La Ofis, pero filo.
Aquí se puede ver que Gervais es un genio...y no es invento mio.
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3 comentarios:
Hahahaha, lo que es yo, me reí a carcajadas, aunque niuno de mis amigos me pesca con verla.
Parece que voy a tener que hacerles un curso de Ricky 101.
Tuvo partes notables.
Agrega a tus favoritos el blog de peña: http://maloentrebuenos.blogspot.com/
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